En un partido intenso, con un ritmo altísimo, los blancos no quisieron desaprovechar la oportunidad de presentar el cacareado nuevo proyecto madridista, que tantas dudas está levantando en este comienzo de temporada. Los de Pellegrini mejoraron mucho su juego, aunque no obtuvieran recompensa.
Cristiano volvió al 'once' y Benzema se quedó en el banquillo. Esas fueron las novedades más sorprendentes en la alineación de Pellegrini. El sacrificado de Guardiola fue Ibrahimovic y el que volvió a la titularidad, Messi.
Los blancos, sabedores de que esperar al Barça en su área era un suicidio, salieron a por todas desde el primer momento. Juego directo contra toque. El Barça dominaba la pelota, pero el peligro lo llevaba el Madrid. Los blancos, con las líneas muy juntas, llegaron varias veces en los diez primeros minutos. La ocasión más clara de la primera mitad tuvo como protagonistas a los dos grandes fichajes del nuevo proyecto faraónico de Florentino, Kaká y Cristiano. El brasileño dirigió la pelota por la banda izquierda y asistió a Cristiano en el área pequeña. El disparo del luso se topó con un acertado Valdés, que salvó a su equipo.
La segunda mitad comenzó con un Barça hambriento, y el Madrid retrocedió su defensa unos cuantos metros. Guardiola decidió mover fichas cuando aún no se habían contado cinco minutos de este segundo tiempo. Henry dejó su lugar en el campo a Ibrahimovic. El Madrid iba a remolque en esta segunda mitad con un Kaká mucho más cansado. Dominaba el Barça y el Madrid salía a la contra. Los blancos tuvieron entonces una clara ocasión por medio de Marcelo. Esta vez fui Puyol el que desbarató la ofensiva blanca. Y en esas llegó el gol azulgrana que resultó definitivo. Un centro de Alves larguísimo llegó a Ibrahimovic que con una volea fortísima fusiló a Casillas y puso el 1-0 en el marcador.
Faltaban treinta y cinco minutos para el final y el Barça empezaba a convertir el partido en un rondo eterno. Pero entonces, Busquets se enloqueció y decidió cortar con la mano una jugada sin peligro en el campo rival. El canterano, bastante descentrado durante todo el encuentro, ya había visto una primera amarilla minutos antes por una falta en el centro del campo. Los locales volvieron a sufrir con diez. Cristiano tuvo una ocasión de cabeza antes de ser sustituido por Benzema, y el punta francés dispuso de otra aún más clara que envió fuera dentro del área pequeña, donde el balón había ido a parar rebotado tras el lanzamiento de un córner.
Pese al acoso visitante, el Barça a estas alturas ya había encontrado su identidad y fabricaba algo de juego a la contra al ritmo de un excelso Iniesta. Abidal y Messi tuvieron dos ocasiones clarísimas para sentenciar en la recta final, pero el francés cruzó demasiado su disparo y al argentino se le apareció San Iker. Los delanteros blancos también lo intentó hasta el final, pero esta tarde se toparon con dos centrales superlativos como Puyol y Piqué.
Los azulgranas recuperan el liderato y suman ahora 30 puntos, mientras el Madrid se queda con 28.